México rebasó la barrera de 90% en el acceso a smartphones entre el total de líneas móviles, con una contabilidad de 109 millones de teléfonos móviles inteligentes en manos de los mexicanos.
Ante la falta de computadoras y tabletas en la mayoría de los hogares mexicanos, el smartphone, se ha erigido como la principal vía de acceso a Internet no sólo para conocer los alcances de la pandemia y las recomendaciones sanitarias, sino también nos ha permitido continuar con nuestra operación económica, educativa, informativa, social, entre otras.
Al segundo trimestre de 2020 y aun en medio de una crisis de salud mundial, el mercado en México, rebasó, por primera vez, la barrera de 90% en el acceso a teléfonos inteligentes (smartphones) entre el total de líneas móviles al alcanzar un nivel de 91.6%, con una contabilidad de 109 millones de teléfonos móviles inteligentes en manos de los mexicanos.
Una tendencia que se pronosticaba desde hace cuatro años, basada en el deseo de los mexicanos para hacerse de un dispositivo móvil inteligente, al ser eslabón principal en la vida y conectividad cotidiana, detalla Rolando Alamilla, analista de la firma de investigación CIU. Al mismo tiempo, que se registra un creciente esfuerzo de los mexicanos por adquirir mejores dispositivos en cada nueva renovación o activación de equipos.
Señala que desde el segundo trimestre del 2016, ya se viene advirtiendo una trayectoria ascendente en el gasto promedio que realiza un mexicano en la compra de un smartphone, a partir de un nivel de 2,656 pesos, que habilitaba la adquisición principalmente de dispositivos de gama baja. Si bien estos dispositivos permiten una comunicación como otros equipos, se encuentran limitados su potencial de uso, al no contar con capacidades superiores almacenamiento y procesamiento.
En los siguientes años, el gasto promedio evolucionó a una tasa de crecimiento promedio anual de 11.3%, lo que evidencia que los usuarios asignan una creciente ponderación a la tenencia de dispositivos de mayores capacidades, a pesar de reducir la velocidad de reemplazo qué pasó de ser de 22.1 meses en 2T-2016 a 23.5 meses en 2T-2020.
El reporte de Alamilla prosigue, y señala que durante este último trimestre, en medio de una doble crisis económica en el país, una inducida por las decisiones de política pública del gobierno federal y otra ocasionada por la crisis pandémica global, que provocaron la mayor caída registrada en la economía mexicana (-18.9%), los usuarios en México continúan registrando esta tendencia ascendente en el gasto promedio por la adquisición de un dispositivo.
En este periodo, el indicador creció 9.9% en términos anuales, al pasar de 3,694 pesos en promedio en 2T-2019 a ubicarse en los 4,058 pesos. Además, es la primera vez que el gasto supera la barrera de los 4,000 pesos.
Este marcado esfuerzo de los usuarios en México por contar con mejores dispositivos nos ha llevado a ser un país que cuenta en su mayoría con dispositivos de gama media (59% del total).
No obstante, amerita resaltar, que hoy en día esta categoría, si bien no cuenta con características como desbloqueo de huella debajo del cristal, zoom óptico, pantallas ‘infinity’ o carga inalámbrica, entre otras incorporadas principalmente en equipos de gama alta; sí cuenta con capacidades de procesamiento y almacenamiento que permiten a los usuarios continuar con sus actividades laborales y escolares en estos momentos de confinamiento.