Autoridades económicas del estado exploran alianzas bancarias para atender un viejo problema: la falta de crédito real para emprendedores y pequeñas empresas.
Por Redacción Economía Regional | 16 de junio de 2025
En un contexto donde el crédito bancario para pequeñas y medianas empresas (pymes) sigue siendo limitado y muchas veces inaccesible, el Gobierno de Quintana Roo busca romper las barreras estructurales que impiden a los emprendedores crecer y consolidarse.
Este lunes, el Secretario de Desarrollo Económico del estado, Paul Carrillo, encabezó una reunión estratégica con representantes del banco BBVA Bancomer. Lo acompañaron Gabriela Esquivel, subsecretaria de Planeación Económica, y Yuliana Sánchez, directora de Financiamiento. Del lado de la institución financiera participaron Karina Andrea Betancur y Leonardo Vázquez Cruz.
El encuentro, realizado en el marco del Nuevo Acuerdo por el Bienestar y Desarrollo de Quintana Roo, impulsado por la gobernadora Mara Lezama, tuvo un objetivo claro: diseñar nuevas alianzas público-privadas que permitan a más negocios locales acceder a esquemas de financiamiento justos, ágiles y sostenibles.
Crédito para crecer, no para sobrevivir
Aunque la narrativa oficial destaca el fortalecimiento del “apoyo empresarial”, los datos muestran un problema más profundo. Según cifras del propio sector bancario, menos del 30% de las pymes en la región acceden a créditos formales, y la mayoría de ellas enfrentan tasas de interés elevadas, trámites engorrosos o falta de historial crediticio.
“Hoy en día, muchas empresas en Quintana Roo recurren al crédito informal o incluso sacrifican crecimiento por falta de liquidez. Esto es un freno para el desarrollo económico local”, señaló una fuente cercana a la Secretaría de Desarrollo Económico que pidió no ser citada.
Una oportunidad para rediseñar el modelo
Desde la SEDE se plantea una colaboración con BBVA que vaya más allá de simples líneas de crédito: se habla de productos financieros diseñados especialmente para negocios turísticos, comercios sostenibles, industrias creativas y cooperativas locales, sectores clave en la economía estatal pero muchas veces marginados por el sistema bancario tradicional.
También se considera la posibilidad de crear garantías compartidas o fondos de primer riesgo, donde el gobierno estatal asuma una parte del riesgo crediticio para facilitar el acceso al financiamiento a quienes no cuentan con avales formales.
Un llamado a la banca privada
Esta reunión con BBVA marca un primer paso, pero no será el único. La Secretaría de Desarrollo Económico prevé reuniones similares con otras instituciones financieras en las próximas semanas. “La inclusión financiera no puede quedarse en el discurso. Necesitamos mecanismos reales que le den oxígeno a quienes generan empleo y riqueza local”, aseguró Carrillo en declaraciones posteriores.
¿Un nuevo capítulo para las pymes en el Caribe mexicano?
De concretarse acuerdos que realmente se traduzcan en créditos accesibles y apoyo técnico, Quintana Roo podría convertirse en un referente de colaboración inteligente entre gobierno y banca privada para el desarrollo económico regional.
Por ahora, las expectativas están puestas en que el “Nuevo Acuerdo” se traduzca en algo más que buenas intenciones. Lo que está en juego es el futuro de miles de pequeñas empresas que sostienen el dinamismo económico del estado… y que, con el impulso adecuado, podrían llevarlo mucho más lejos.
