PODER Y ESTADO PERFILES

Por la baja del petróleo, el precio internacional del maíz alcanzó el nivel más bajo de los últimos 10 años


A la menor demanda de etanol se suma el avance de siembra del cereal en Estados Unidos. También cayeron los precios de la soja, por los efectos en el mercado de aceites y el avance del coronavirus
La caída histórica que sufrió este lunes el valor del petróleo, tuvo su impacto negativo en los precios internacionales del maíz, que alcanzaron los niveles más bajos de los últimos 10 años, por la menor demanda de etanol. También cayeron los futuros de soja. Todo esto afectó los valores del mercado local.

Según los especialistas de Fyo, “las cotizaciones de maíz caen a causa de la fuerte reducción de la demanda en Estados Unidos para la producción de etanol. A todo esto se suma el avance de la siembra en Estados Unidos, donde el Departamento de Agricultura de dicho país, podría informar mañana el avance de siembra al 7%, donde se estima una campaña récord que generaría mayor presión a los precios”.

Hay que recordar que el maíz es el insumo necesario para la elaboración de etanol, que reemplaza el consumo de derivados del petróleo. Pero también el petróleo está relacionado con la producción y traslado de granos y oleaginosas a los diferentes centros de comercialización.

Actualmente la industria del etanol atraviesa un proceso de crisis en los Estados Unidos, teniendo en cuenta que más del 90% de la gasolina de dicho país contiene etanol. También en la Argentina hay un efecto de esta problemática en varias plantas productoras de etanol de maíz.
En esta jornada, los precios del maíz cuyos contratos vencen en mayo próximo cayeron USD 3,1 en el mercado internacional de Chicago y cotizaron a USD 123,7 la tonelada. Por su parte, los contratos mayo de la soja cayeron USD 2,2 y cotizaron a USD 303,7 la tonelada, por el impacto de la baja del petróleo en el mercado de aceites, pero además por el cierre de plantas de cerdos en los Estados Unidos, como consecuencia del avance del coronavirus, provocando una menor demanda de forrajes.

En la Bolsa de Comercio de Rosario, los valores de compras cotizaron por debajo de la rueda del viernes pasado, tanto para la soja como para el maíz, y se registraron mejoras entre las ofertas por trigo de la nueva cosecha. Los precios del maíz disponible cayeron USD 3,7 y la tonelada cotizó a USD 126,5. Por el lado de la soja, los contratos con vencimiento en mayo operaron con una baja de 50 centavos de dólar y la tonelada se pagó a USD 215,5. Además, el trigo posición enero 2021 alcanzó los 171 dólares la tonelada.

Todo este contexto de precios a la baja del maíz y la soja, se produce mientras en la Argentina avanza la cosecha de ambos cultivos. Hasta la semana pasada se había cosechado el 33% del área sembrada con maíz y el 38% del área con soja. Las proyecciones de producción total se ubican en 49,5 millones de toneladas para la soja y en 50 millones de toneladas para el maíz.

Repercusiones

En diálogo con este medio, Sebastián Salvaro, de la consultora AZ Group, comentó: “Es pésimo el panorama internacional para el maíz, especialmente por lo que está sucediendo con los precios del petróleo, pero también afecta el posible aumento de siembra en Estados Unidos, y por otro lado, que el mercado ya no depende tanto de dicho país para la exportación mundial, porque hay otros países como Argentina, Brasil y Ucrania, que tienen una participación en el mercado internacional del 45% y que se destacan con buenos niveles de producción”.
Este escenario de precios a la baja, sumado a los menores rendimientos cosechados en soja, y el aumento de las retenciones, fue una problemática que plantearon en un comunicado los productores autoconvocados del noreste de la provincia de Buenos Aires, quienes aseguraron que frente a este panorama, la actual cosecha gruesa “tendrá un resultado económico negativo en dicha zona”.

Los consultores Teo Zorraquín y Alejandro Meneses manifestaron en su informe mensual que las empresas agropecuarias están “priorizando la caja y pensando hacia adelante esquemas defensivos, donde se están adelantando la compra de insumos, no se realizan inversiones que estaban postergadas, y se disminuyen o anulan los proyectos de expansión del negocio”.

Fuente:www.infobae.com

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