La madrugada en Pátzcuaro no trajo calma. Las calles del emblemático pueblo michoacano se convirtieron en escenario de guerra cuando presuntos integrantes del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) emboscaron a fuerzas de seguridad.
El saldo: tres policías estatales y tres municipales heridos. El mensaje: el crimen organizado sigue marcando territorio.
Mientras el turismo intenta sostener la imagen de un Pátzcuaro pintoresco, la violencia recuerda que en Michoacán, la paz aún es frágil.