El secretario general de la ONU, António Guterres, pidió establecer restricciones para las armas autónomas, controladas por inteligencia artificial y reconocimiento facial.
El secretario general de la ONU, António Guterres, pidió el lunes que se establezcan nuevas normas sobre el uso de armas autónomas, en el marco de una reunión clave sobre el tema que comenzó en Ginebra.
Los negociadores de la ONU llevan ocho años discutiendo los límites de las armas autónomas letales, que están totalmente controladas por máquinas y se basan en nuevas tecnologías como la inteligencia artificial y el reconocimiento facial. Pero la presión ha aumentado en parte debido a un informe de un panel de la ONU en marzo que decía que el primer ataque con drones autónomos ya podría haber ocurrido en Libia. “Animo a la Conferencia de Revisión a acordar un plan ambicioso para el futuro que establezca restricciones al uso de ciertos tipos de armas autónomas”, dijo Guterres al inicio de las conversaciones de cinco días.
La Convención sobre Ciertas Armas Convencionales cuenta con 125 participantes, entre ellos Estados Unidos, China e Israel.
Algunos Estados participantes, como Austria, piden la prohibición total de las armas autónomas letales, mientras que otros, como Estados Unidos, se han mostrado más reticentes y han señalado las posibles ventajas de estas armas, que podrían ser más precisas que los humanos a la hora de alcanzar objetivos.
Amnistía Internacional y grupos de la sociedad civil piden que los países empiecen a negociar un tratado internacional y presentarán una petición a los negociadores el lunes. “El ritmo de la tecnología está empezando a superar el ritmo de las conversaciones diplomáticas”, dijo Clare Conboy, de Stop Killer Robots. “(Esta) es una oportunidad histórica para que los Estados tomen medidas para salvaguardar a la humanidad contra la autonomía en el uso de la fuerza”.