Fabiola Piñacué, una empresaria originaria de la comunidad de las Calderas, ubicada en el departamento del Cauca, Colombia, es conocida mundialmente por dos cosas: la primera, haber fundado Coca Nasa, una empresa que busca resaltar los beneficios de la hoja de coca a través de una variedad de productos, que van desde bebidas hasta pomadas; en el camino tuvo que realizar la segunda cosa por la que es conocida: haber vencido a la empresa multinacional Coca-Cola en un pleito legal. Esta es su historia.
Todo comenzó hace un par de décadas, cuando Fabiola Piñacué emprendió un viaje, desde el departamento del Cauca hacia Bogotá, con el propósito de iniciar sus estudios universitarios. A principios de los años 2000, ya en la capital, Fabiola Piñacué ingresó a la Universidad Javeriana, donde se postuló para cursar la carrera de Ciencias Políticas, según informó ella misma en entrevista para el periódico colombiano El Tiempo.
Durante su etapa como estudiante en esa institución educativa, la joven hizo un descubrimiento significativo basado en sus costumbres y tradiciones: la hoja de coca se convertiría en su aliada, no solo en términos culturales, sino también como base para establecer un negocio y asegurar su sustento. Al compartir su conocimiento sobre esta planta con otros estudiantes, venderla y hablar sobre ella en conferencias y conversatorios, Fabiola vislumbró el potencial de un negocio que se convertiría en una realidad años más tarde. Así fue como nació Coca Nasa, una empresa dedicada a la explotación de la hoja de coca a partir de sus beneficios naturales:
“Comencé de la manera más tradicional y fue ofreciendo la hoja de coca a las personas, llevándoles aromática preparada, haciendo que la probaran y haciendo un proceso pedagógico de contarle a la gente que la hoja de coca se tomaba, se podía masticar y la hicimos en una presentación en una bolsita”, relató la empresaria a el periódico El Tiempo.
