Maradona fue ingresado el lunes a una clínica por problemas emocionales y una anemia, pero su médico declaró que “ya está mejor y con ganas de irse”.
Tras pasar una noche hospitalizado, Diego Armando Maradona se encuentra mejor y con ganas de irse, informó esta mañana el médico del futbolista.
La leyenda argentina del fútbol Diego Armando Maradona fue ingresado el lunes a una clínica privada de la ciudad de La Plata, al sur de Buenos Aires, para someterlo a chequeos médicos, informó su médico personal Leopoldo Luque.
Los médicos de Maradona explicaron en los últimos meses que, además de tener antecedentes cardiólogos, ser hipertenso y haber sido operado de la rodilla derecha en 2019, el “D10S” sufre de insomnio.
El médico de “El Pelusa” aseguró que “está bien de ánimo; la idea es mejorarlo todo lo que se pueda. Estuvo caminando dentro de la clínica. Uno tiene un objetivo mucho más alto y lo vamos a seguir buscando. Tiene que tener un tratamiento a largo plazo“.
El doctor explicó que la anemia de Maradona se debe al by pass gástrico que hace que no se absorba bien el hierro y eso le influye, por lo cual se siente débil y cansado.
Los altibajos de Maradona
A lo largo de su vida tuvo muchos problemas de salud, algunos relacionados con una vida de excesos que lo llevaron incluso al borde de la muerte.
En 2000 tuvo una crisis cardíaca por sobredosis en el balneario uruguayo de Punta del Este y le siguió un largo tratamiento con altas y bajas en Cuba.
En 2004, y con más de 100 kilos de peso, otra crisis cardíaca y respiratoria lo sorprendió en Buenos Aires, pero se recuperó, tras una cirugía de estómago logró bajar 50 kilos.
En 2007 el exceso de consumo de alcohol motivó una nueva internación por una hepatitis tóxica.
Su último problema de salud fue en las rodillas, por lo que debió someterse a cirugías para colocarse prótesis.