La descarada invasión rusa a Ucrania, ordenada por el presidente Vladimir Putin, tendrá consecuencias terribles para todo el mundo, pero en particular para Europa.
La descarada invasión rusa a Ucrania, ordenada por el presidente Vladimir Putin, tendrá consecuencias terribles para todo el mundo, pero en particular para Europa. Por ahora sabemos que países del G7, específicamente Estados Unidos, Canadá, Reino Unido, Japón, Francia, Italia y Alemania, han respondido imponiendo una serie de sanciones económicas. Dichas sanciones incluyen la congelación de activos fuera del país de los cuatro principales bancos rusos, un veto de exportación para productos de alta tecnología en las áreas de semiconductores, aeroespacial, y naval, y limitantes para negociar en las monedas de países que se están adhiriendo a dichas sanciones. Cabe señalar que esta retaliación económica por parte del Occidente no tiene precedentes, y que ya ha borrado el valor de la Bolsa de Moscú en 40%, elevado las tasas de interés soberanas de Rusia de 11% a 15%, y tumbado el precio del rublo ruso a mínimos históricos.
En cuanto a la economía mundial refiere, los efectos de esta guerra se verán reflejado en el alza de inflación, en el entorpecimiento de las cadenas de valor, y en una desglobalización en el largo plazo. El tamaño de dichos efectos dependerá de qué tanto se prolongue esta innecesaria guerra, así como de las intenciones de expansión territorial de Rusia. A continuación, explico el impacto de la guerra ruso-ucraniana en estas tres variables económicas, mientras que enumero otras sanciones económicas que países del Occidente podrían incluir en un futuro cercano si la invasión no cesa.
Por un lado, la inflación no subyacente comienza a sufrir en todo el mundo. Rusia es uno de los mayores exportadores de petróleo y gas natural, por lo que las sanciones económicas tienen un efecto boomerang que se ve reflejado en los precios de los energéticos. Este impacto será particularmente notorio en Europa, la cual depende mucho del gas natural proveniente de Rusia. No dude que pronto veremos la reactivación de plantas de energía nuclear en Alemania y otros países europeos, los cuales siguieron una política de desnuclearización desde el incidente en Fukushima, Japón. Fuera de Europa, veremos que la gasolina y el diésel también tendrán importantes alzas. Para contrarrestar un poco dicho efecto, Estados Unidos estará ofreciendo parte de sus reservas estratégicas de gasolinas.
Asimismo, Rusia y Ucrania son exportadores importantes de metales como el cobre, el aluminio, y el níquel. Estos metales se utilizan para fabricar semiconductores, los cuales ya han sufrido de un entorpecimiento en su elaboración a causa de la pandemia del Covid-19. Cuellos de botella para productos que utilizan semiconductores como lo son los vehículos, computadoras, celulares y otros aparatos electrónicos, se agravaran por la escasez de insumos para fabricar dichos chips.
Por otro lado, estamos en la antesala de una desglobalización nunca antes vista. Los países tenderán a cerrar sus fronteras. Muy probablemente muchas naciones decidan refrendar sus planes nucleares para poder defenderse (Ucrania entregó su armamento nuclear). Aún peor, el comercio internacional verá una época oscura, en donde la seguridad nacional tomará un lugar por encima de la cooperación mundial y las ventajas comparativas entre naciones. Esto sin duda ralentizará el crecimiento de la economía mundial en el largo plazo.
Finalmente, se debe de destacar que países del G7 están dispuestos a seguir imponiendo más sanciones económicas a medida que el conflicto avance. Dentro de dichas sanciones económicas se encuentran suspender a Rusia del uso de pagos internacionales SWIFT, confiscar la riqueza que tengan en el extranjero los oligarcas rusos cercanos al presidente Putin (valorada en 85% del PIB de Rusia), así como prohibir la importación de energéticos rusos, si la situación lo amerita. No obstante, dichas sanciones tenderán a agravar aún más los costos para el mundo en las variables económicas anteriormente señaladas. Todo esto con el fin de hacer recapacitar a un dictador como el presidente Putin, y así prevenir la muerte innecesaria de civiles inocentes.