Por: Joaquin Pacheco Cabrera
La reciente inversión de más de 200 mil millones de pesos en infraestructura en Quintana Roo marca un hito sin precedentes en la historia del estado. Esta monumental cifra, que supera cualquier inversión previa, no solo simboliza un compromiso financiero, sino una apuesta decidida por la prosperidad compartida y el desarrollo equitativo en todas las regiones de la entidad.
La gobernadora Mara Lezama Espinosa ha liderado esta transformación con una determinación palpable, cimentando su gobierno en la premisa de cerrar las brechas de desigualdad y abatir el rezago histórico que ha lastrado el crecimiento del estado. Desde el inicio de su mandato, Lezama ha adoptado un enfoque integral, promoviendo obras que abarcan desde la modernización de infraestructuras urbanas hasta el fortalecimiento de servicios esenciales en comunidades rurales.
Una de las iniciativas más destacadas es el Tren Maya, una obra de infraestructura que promete revitalizar la región sur del estado, conectar comunidades y estimular el turismo. A este proyecto se suman el Aeropuerto Internacional “Felipe Carrillo Puerto” en Tulum, el rescate de zonas arqueológicas a través del programa PROMEZA, y una ambiciosa modernización de carreteras. Estos proyectos no solo generan empleos, sino que también fomentan la justicia social al brindar acceso a mejores servicios y oportunidades para todos.
La gestión de Mara Lezama se ha hecho sentir también en Cancún, el principal destino turístico del país. La modernización del bulevar Colosio, la ampliación de la avenida Chac Mool, y el innovador puente sobre la laguna Nichupté son solo algunas de las mejoras que transformarán la movilidad y la infraestructura urbana. Estas obras están diseñadas no solo para atender la creciente demanda turística, sino para mejorar la calidad de vida de los residentes, contribuyendo a un desarrollo urbano más equilibrado y sostenible.
En el centro y sur del estado, el impacto es igualmente profundo. La renovación del Museo de la Guerra de Castas y la construcción de nuevas calles y luminarias en Felipe Carrillo Puerto, así como la revitalización de espacios culturales como el Parque Quintana Roo y la Fábrica de Artes y Oficios en Chetumal, demuestran un compromiso con el enriquecimiento cultural y educativo de la región. La construcción de aulas, domos y espacios deportivos subraya la importancia de la educación y el bienestar integral en la agenda gubernamental.
La atención a la salud y la justicia social también han sido prioridades. La construcción de nuevos hospitales y la modernización de centros de justicia para mujeres destacan el enfoque en la mejora de los servicios esenciales. La sectorización de la red de agua potable y las obras de alcantarillado en diversas localidades reflejan un compromiso con la infraestructura básica, fundamental para la calidad de vida.
Estos proyectos revelan un esfuerzo coordinado por transformar Quintana Roo en un estado más equitativo y próspero. La gobernadora Mara Lezama, apoyada por el gobierno federal, ha hecho realidad una visión ambiciosa que busca superar décadas de rezago y construir un futuro inclusivo para todas las y los quintanarroenses.
La inversión sin precedentes en infraestructura y el enfoque en el desarrollo social marcan un antes y un después en la historia del estado. El gobierno de Mara Lezama está escribiendo una nueva página en la historia de Quintana Roo, caracterizada por una transformación profunda que va más allá de las cifras y se manifiesta en la mejora tangible de la vida cotidiana de sus habitantes. La Nueva Era de la Transformación, prometida desde el primer día, se está materializando de manera palpable, demostrando que el amor por Quintana Roo y el compromiso con su desarrollo son una realidad innegable.