La política de “COVID cero” impulsada por el Gobierno de China para contener la pandemia “es insostenible”, afirmó el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, y aseguró que habló del tema con expertos de dicho país.
“Cuando hablamos de la estrategia de COVID cero, pensamos que es insostenible, teniendo en cuenta la evolución actual del virus y nuestras previsiones”, mencionó Tedros en una conferencia de prensa en Ginebra.
Por su parte, el director de situaciones de urgencia, Michael Ryan, coincidió con el titular de la OMS al decir que hay que tener capacidad de adaptarse a las diversas circunstancias.
“Como lo dijo el doctor Tedros, hay que tener capacidad de adaptarse a las circunstancias, a lo que vemos en los datos y él habló en detalle con los colegas chinos”.
Recordó que durante un tiempo esta estrategia posibilitó a China mostrar un resultado de pocos muertos con relación a su población, “es algo que China quiere proteger”, reconoció el doctor Ryan.
- Frente al alza del número de muertos desde febrero y marzo, es lógico que el Gobierno de China reaccione, subrayó Michael Ryan.
“Pero todas sus acciones, como nosotros lo repetimos desde el inicio, deben ser tomadas con respeto a los individuos y los derechos humanos” agregó.
Brotes de COVID-19 en China
El confinamiento comienza a afectar los nervios de la población de Shanghái tras 40 días de restricciones, y la ciudad es escenario de hechos poco comunes, como enfrentamientos en plena calle o la huida de obreros de una fábrica.
- La ciudad más poblada de China confinó a sus 25 millones de habitantes a principios de abril con la esperanza de frenar la peor oleada de COVID desde la primera de inicios de 2020.
Shanghái ha registrado oficialmente más de 500 muertos en algunas semanas, una hecatombe para China, donde el saldo total informado por las autoridades supera apenas los cinco mil decesos desde el inicio de la pandemia.
A pesar de una fuerte baja de la cifra diaria de contagios, las autoridades refuerzan su arsenal de medidas anti-epidémicas, en nombre de la estrategia “COVID cero” que el régimen comunista vendió a su población como la prueba de su superioridad política sobre Occidente.
En reacción, la población se exaspera y ya no duda en enfrentarse con las fuerzas de seguridad en un país en el que, sin embargo, las protestas no son toleradas.