Una investigación publicada por ‘The Lancet’ asegura que no existe evidencia de que las guarderías sean un foco de contagio entre los preescolares.
La transmisión de Covid-19 entre niños pequeños “es baja”, según indica un estudio publicado por la revista británica The Lancet que asegura que “no existe evidencia” de que las guarderías sean un “foco de contagio viral” entre los preescolares, más propensos a contraerla “en casa” que en los centros.
La investigación, llevada a cabo por médicos franceses, pretende ayudar a entender “cómo y en qué medida” contribuyen los niños que asisten a las guarderías a transmitir el virus, indica el documento, y para ello se tomó a tres grupos de estudio.
En primer lugar, 327 niños de entre 5 meses y 4 años; además de 190 trabajadores de guarderías, y un grupo comparativo de 164 trabajadores de hospitales sin contacto con niños. Sin embargo, tal y como explica a Efe una de las investigadoras, Camille Aupiais, también contaron con “información adicional” de los padres de los niños.
Esta investigación, la primera “multicentros” en seroprevalencia y enfocada en niños en guarderías, se realizó en tres ciudades de Francia: París (la región más afectada), y otras dos con menor incidencia: Ruán (Normandía) y Annecy, en los Alpes.
Aupiais cuenta que la decisión de este novedoso enfoque se tomó por la falta de datos en este campo; por el hecho de que los niños “no suelen infectarse por Covid, o, de hacerlo, es de forma asintomática o con síntomas leves”; y porque la mayoría de guarderías y colegios estaban cerradas en Francia al inicio de la pandemia en 2020.
Pero algunas permanecieron abiertas, a las que asistían los niños de “trabajadores esenciales” y por tanto más “expuestos” al virus que el resto de la gente que estaba en casa, por lo que se pensó que sería una “gran experiencia para descubrir si se infectaban más o no”, según la investigadora.
De acuerdo con los datos incluidos en el informe, los niños (hasta 17 años) conforman entre el 1% y el 8% del total de los casos de Covid-19 confirmados por laboratorio y entre el 2% y el 4% de los pacientes hospitalizados.
Durante las ocho semanas que duró la investigación, se tomaron muestras de sangre y se realizaron test PCR a todos los participantes, que dieron resultados positivos en el 3.7% de los niños y el 6.8% de los trabajadores de guardería. Unos datos que, a juicio de los autores del estudio, no difieren “significativamente” del 5% registrado entre los empleados de hospitales.
El estudio añade que los 14 niños seropositivos provenían de 13 guarderías distintas y en el centro que registró dos casos los pequeños tenían “zonas separadas, por lo que no se baraja la opción del contagio “niño a niño”. Tampoco se observaron diferencias entre los trabajadores de guardería expuestos a niños contagiados con los que no.
Por este motivo, Aupiais defiende “mantener las guarderías abiertas en el futuro”, y asegura que el cierre de los centros escolares en el resto de los países europeos “no parece afectar” demasiado a la evolución de la pandemia, opinión compartida por la Asociación Francesa de Pediatría.
Pese a todo, el estudio concluye advirtiendo sus limitaciones, ya que en el momento de la investigación no se conocían las nuevas variantes del virus que existen ahora, como la británica, la brasileña o la sudafricana, y se ignora si los pequeños son “más o menos susceptibles” a estas cepas.