El presidente indicó que la eliminación de unos 200 órganos autónomos del gobierno federal iniciará con los que no fueron creados por ley.
La eliminación de los órganos autónomos de la Administración Pública Federal comenzarán por suprimir las entidades creadas por decreto del Ejecutivo Federal y que no necesitan una reforma legal, adelantó el presidente Andrés Manuel López Obrador.
El mandatario explicó este jueves que de los alrededor de 200 organismos, la revisión se enfocará en una primera instancia en los que no tienen una ley de por medio.
“Vamos a revisar cuántos organismos hay así, que significan duplicidades, gastos superfluos. Vamos a hacer primero la revisión de los que no necesitan reforma legal, que fueron creados por el Ejecutivo”, afirmó en su conferencia matutina.
López Obrador mencionó que como parte de la Secretaría de Gobernación, existe el Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (SIPINNA), dirigido por Ricardo Bucio, pero este órgano –en su opinión– tiene las mismas funciones que el DIF.
“Existe un organismo en Gobernación para defender a niños, niñas y adolescentes, pero al mismo tiempo está el DIF, ¿por qué ese organismo no pasa a formar parte del DIF?”, cuestionó.
“Y luego ya vemos otros organismos autónomos creados por ley, cuántos hay, y cuánto nos cuestan y si podemos trasladar las funciones de esos organismos a las dependencias existentes”, explicó.
El titular del Ejecutivo se comprometió a que no despedir a ningún trabajador, aunque en su explicación aludió solamente a los trabajadores de base.
El 12 de enero, Forbes México publicó que órganos como el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (Inai), la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece), el Instituto Federal de Telecomunicación (IFT), la Comisión Reguladora de Energía (CRE) y la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) sólo cuentan con empleados de confianza, lo que implicaría la desaparición de 3,268 empleos.
Sobre los órganos independientes relacionados con el sector energético, López Obrador detalló que se encuentran contemplados en el marco del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), por lo que se cuidará la interpretación del texto del acuerdo para la desaparición de éstos.
“Hay algunos que tienen que ver con el tratado de libre comercio. Depende de la interpretación, en el caso energético nosotros cuidamos que las decisiones de México sean soberanas, entonces hay que ver qué interpretación se le quiere dar al tratado”, comentó.
La primera semana de enero, el presidente planteó que se hará una reforma administrativa para incorporar los órganos autónomos a las secretarías de Estado y otras dependencias existentes.
Entre los cambios deseados, planteó que el Inai podría incorporarse a la Secretaría de la Función Pública o la Auditoría Superior de la Federación, mientras que el IFT se podría integrar a Comunicaciones y Transportes o la CNH y la CRE a la Secretaría de Energía.
El pasado lunes, el gabinete federal se reunió con López Obrador para comenzar la evaluación para avanzar con esta reforma.
Especialistas en transparencia, competencia económica y derechos humanos han insistido en que estas medidas atentan contra los derechos de la ciudadanía y representan un retroceso y un riesgo que aumentaría el poder del presidente y le restarían controles.
