El Borussia Mönchengladbach derrotó este sábado a domicilio por marcador de 1-3 al Eintracht Fráncfort, con lo que subió al tercer lugar
El Borussia Mönchengladbach derrotó este sábado a domicilio (1-3) al Eintracht Fráncfort con lo que asciende al tercer lugar de la clasificación y se mantiene dos puntos por debajo del Borussia Dortmund y cuatro por debajo del Bayern Munich, aunque los bávaros pueden aumentar la ventaja pues visitarán este domingo el Union Berlin.
El Gladbach tuvo un arranque demoledor y en la primera jugada se fue en ventaja por intermedio de Alasane Plea, cuando apenas habían pasado cerca de 40 segundos desde el pitido inicial.
Plea, tras recibir un pase de Breel Embolo, se asoció con Jonas Hoffmann que le devolvió la pelota para que el francés, con un disparo cruzado, derrotara al meta Kevin Trapp.
El Eintracht todavía no había terminado de recuperarse del gol de Plea cuando llegó el segundo golpe. Marcus Thurman, en el minuto 7, marcó el segundo con remate dentro del área a centro desde la izquierda de Ramy Bensebaini.
Los dos goles tempraneros marcaron el partido, el Eintracht jugaba contra la corriente y tenía dificultades en llegar.
La única ocasión clara para el Eintracht en la primera parte fue una falta lanzada en el minuto 23 por Filip Kostic ante la que el meta Yann Sommer reaccionó con una buena parada.
El Gladbach parecía tener más pegada y cada vez que se acercaba al área generaba zozobra.
La sentencia estuvo a punto de llegar en el 68 cuando Plea remató desde fuera del área contra el poste.
Del Eintracht era poco lo que se veía y no había nada que pudiera hacer pensar que el equipo de Adi Hütter pudiera darle la vuelta al partido.
Las dudas que podían quedar se disiparon en el 73 cuando Bensebaini marcó el tercero de penalti, después de que Embolo recibiera una falta dentro del área.
En el 80, en su primer disparo a puerta en la segunda parte, el Eintracht logró el gol del honor por mediación de André Silva.
Silva marcó con un remate de pierna derecha dentro del área tras recibir un pase de Sebastian Rode.
En el 85, Hoffmann tuvo el cuarto en sus pies pero en el último instante el defensa Hinteregger logró atravesarse en su remate sobre la raya de gol.
El gol de Silva pareció darle algo de aire aire al Eintracht pero era demasiado tarde para pensar en la remontada.
Con información de EFE