Eiza González Reyna, hija de la modelo Glenda Reyna y de Carlos González, posee una historia de resiliencia tras perder a su padre a los 12.
Es una de las actrices del momento y una de las mexicanas más famosas en Hollywood: Eiza González brilla como una de las divas latinas e hispanas del cine actual, y lo hace estrenando nueva casa en Ojai (California) en medio de la polémica.
Y es que mientras disfruta de su nuevo hogar, valorado en cuatro millones de dólares según The Hollywood Reporter, la actriz y cantante está en el punto de mira a raíz del éxito de las canciones con las que Shakira y Miley Cyrus cantan a sus ex… Porque, por increíble que parezca, hay relación entre los “beefs” del momento y el pasado amoroso de González.
Eiza González Reyna nació el 30 de enero de 1990 en Ciudad de México. Hija de la modelo Glenda Reyna y de Carlos González, la vida le preparó un duro golpe en 2002 cuando, con tan solo 12 años, Eiza perdió a su padre en un accidente.
“Es un hecho que me ha sido muy difícil de superar y aún me duele, pero que me ha dado las fuerzas para salir adelante y me hizo madurar”, dijo la actriz en una entrevista publicada por Milenio.
Curiosamente, Eiza cree que esta trágica pérdida fue determinante para que tomase el camino de la interpretación: “mi padre estaba muy cerrado a la posibilidad de que fuera actriz”.
Y continuó: “él tenía la idea de que acabara mi carrera; por lo que creo que, si aún viviera, yo no estaría hoy aquí”, confesó, aunque añadió que “cambiaría todo esto por el hecho de que hoy estuviera conmigo”.
Sin embargo, la vocación de González fue muy temprana, y con 14 años logró ser aceptada en la escuela de Televisa, habiéndose formado previamente en M&M Studios con Patricia Reyes Spíndola, de quien asegura haber “aprendido muchísimo”; y posteriormente en el Lee Strasberg Theatre and Film Institute de Nueva York.
Durante todo ese camino, hubo alguien con quien pudo contar a pesar de la ausencia paterna. “Mi madre siempre fue muy fuerte y me ayudó a salir adelante, apoyándome en todo lo que quería hacer, como convertirme en actriz”, explicó. “Para ello me metí a estudiar en varias escuelas, una de ellas la de Patricia Reyes Spíndola, de quien aprendí mucho”.
Fue mientras estudiaba en Televisa, que la descubrió el productor y director mexicano Pedro Damián, quien había estado detrás de éxitos como RBD. De este modo, Eiza fue elegida para protagonizar “Lola, érase una vez”, la adaptación mexicana de la exitosa telenovela juvenil argentina “Floricienta” basada a su vez en “La Cenicienta”.