27 de noviembre, 2024
Marcelo Ebrard, secretario de Economía de México, advirtió que los aranceles propuestos por el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, a productos mexicanos serían un grave error para la economía estadounidense. Durante su intervención en la conferencia matutina en Palacio Nacional, Ebrard calificó esta medida como un “tiro en el pie” para las empresas de EE.UU., ya que, según sus cálculos, podría resultar en la pérdida de hasta 400,000 empleos en ese país.
El secretario explicó que la imposición de aranceles sobre productos mexicanos afectaría no solo el comercio entre ambas naciones, sino que tendría repercusiones negativas para las empresas estadounidenses que dependen de la manufactura y los insumos que provienen de México. “Lo que Trump no parece entender es que este tipo de medidas perjudicaría a las industrias que operan en su propio territorio, y el costo de esos aranceles lo asumirían, en gran parte, los consumidores estadounidenses”, aseguró Ebrard.
El secretario de Economía destacó que los aranceles no solo tendrían efectos económicos negativos, sino también sociales. Según un análisis realizado por su equipo, el establecimiento de impuestos sobre productos mexicanos desencadenaría una posible pérdida de 400,000 empleos en los Estados Unidos, afectando principalmente a sectores como la manufactura, la tecnología y el comercio minorista, que dependen de la cadena de suministro binacional.
Ebrard subrayó que una política proteccionista de esta magnitud podría llevar a una mayor inflación y aumentar los costos de productos básicos, perjudicando a los consumidores estadounidenses. Además, agregó que la estrecha relación comercial entre ambos países —en la que México es un socio clave para sectores industriales y de manufactura en EE.UU.— debería ser considerada cuidadosamente antes de tomar decisiones que amenacen este equilibrio.
El titular de la Secretaría de Economía reiteró que México mantiene su postura de buscar soluciones por medio del diálogo y la negociación. Destacó que el gobierno mexicano está preparado para defender los intereses de los productores nacionales, pero siempre en el marco de un entendimiento diplomático y con el respaldo de la comunidad internacional.
En este sentido, Ebrard subrayó que el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) sigue siendo un acuerdo clave para garantizar la estabilidad comercial en la región, y que las políticas unilaterales, como las que propone Trump, contravendrían los principios de libre comercio y cooperación internacional que sustentan este tratado.
A medida que se acerca el inicio del mandato de Trump, las tensiones comerciales entre México y Estados Unidos parecen intensificarse. Las declaraciones de Ebrard reflejan la preocupación de México por el impacto que estos aranceles tendrían no solo en la economía nacional, sino también en el bienestar de los ciudadanos estadounidenses.
La administración de Andrés Manuel López Obrador se mantiene firme en su compromiso de defender los intereses económicos y laborales de México, pero también busca evitar una escalada en el conflicto, apostando por la diplomacia y el entendimiento mutuo. El futuro del comercio y la relación bilateral entre ambos países depende en gran medida de la capacidad para encontrar soluciones que beneficien a todas las partes involucradas.