Por: Joaquin Pacheco Cabrera
La reciente inundación en la capital del estado ha planteado nuevos desafíos para la salud pública en Chetumal, especialmente en términos de la propagación de enfermedades transmitidas por mosquitos. En este contexto, la Secretaría de Salud Quintana Roo ha lanzado una enérgica campaña de termonebulización como medida preventiva crucial.
El operativo, que moviliza recursos significativos como 16 vehículos equipados con máquinas pesadas, 10 termonebulizadoras, 5 motomochilas y un equipo especializado de 38 vectores, se enfoca en cubrir 44 zonas prioritarias de la capital. Estas áreas han sido seleccionadas estratégicamente debido al aumento potencial de la población de mosquitos después de las fuertes lluvias.
La termonebulización es una estrategia efectiva para reducir la población de mosquitos adultos, mitigando así el riesgo de enfermedades como el dengue, que pueden propagarse rápidamente en ambientes húmedos. Sin embargo, la efectividad de estas medidas depende en gran medida de la colaboración activa de la comunidad.
Es esencial que los residentes de Chetumal adopten prácticas personales de prevención, como eliminar recipientes que puedan acumular agua estancada en sus hogares y alrededores. Además, apoyar y facilitar el acceso del equipo de salud a las áreas afectadas es fundamental para maximizar el impacto de estas intervenciones preventivas.
En un momento de desafíos climáticos y sanitarios, la respuesta rápida y coordinada de la Secretaría de Salud Quintana Roo es digna de reconocimiento. Su compromiso con la salud pública y la seguridad de los ciudadanos de Chetumal es evidente en la implementación de estas medidas preventivas.
Mantener la capital libre de enfermedades transmitidas por mosquitos requiere un esfuerzo conjunto y continuo. Con la participación activa de todos los sectores de la comunidad, podemos mitigar los efectos de las inundaciones y garantizar un entorno más seguro y saludable para todos los habitantes de Chetumal.
