Joaquín Pacheco Cabrera
En un acto cargado de emotividad y compromiso, Claudia Sheinbaum Pardo formalizó su candidatura a la Presidencia de México. Con una convicción palpable y un llamado a la unidad que resuena en cada palabra, en un país donde la política a menudo ha estado marcada por la división, destacó la importancia de mantener la cohesión en el movimiento de la Cuarta Transformación.
En la entrega de su constancia de ratificación y declaratoria como candidata de Morena a la Presidencia, durante la Cuarta Sesión Ordinaria del Consejo Nacional de ese partido, celebrada este domingo, Sheinbaum agradeció a los diversos actores políticos y miembros del partido que la han respaldado. Desde Alfonso Durazo y Mario Delgado hasta figuras como Ricardo Monreal y Marcelo Ebrard, la candidata reconoció la importancia de la unidad en la construcción de un proyecto sólido.
En su reflexión, previa a la toma de protesta, Sheinbaum se sumergió en una reflexión sobre los principios que sustentan al movimiento morenista y destacó la pluralidad que lo caracteriza. Más allá de las diferencias individuales, dijo, el Humanismo Mexicano se erige como el pilar que lo une, trascendiendo fronteras y convirtiéndose en un referente a nivel mundial en la lucha contra el neoliberalismo.
La hoy candidata subrayó la importancia de respetar las encuestas como un instrumento que ha demostrado ser clave para mantener la cohesión interna. En un tono firme aseguró que, por encima de las ambiciones individuales, el verdadero compromiso es con el movimiento de Transformación, la patria y el pueblo de México.
En su discurso, hizo una retrospectiva histórica, recordando la lucha del pueblo mexicano contra regímenes antidemocráticos y destacó a la libertad y la democracia como reivindicaciones propias del Humanismo Mexicano, así como los logros del Gobierno de Andrés Manuel López Obrador, enfocándose en la recuperación de instituciones de seguridad social y la ampliación de derechos para el pueblo.
Claudia proclamó que la verdadera libertad es la que se ha conquistado con la Cuarta Transformación, convocando a no permitir que la derecha se adueñe de las herramientas discursivas sobre la libertad y la democracia, y a mantenerse firmes en estos principios, pues si el proyecto de la derecha carece de sustento, el de Morena –afirmó– representa el futuro del pueblo mexicano.
Su discurso culminó con la promesa de unidad, organización, movilización, responsabilidad histórica y cero corrupción, enfatizando su llamado a cuidar la unidad del movimiento, una responsabilidad recae en todos.
De esta manera, en este periodo de intercampaña, se comprometió a fortalecer los Diálogos por la Transformación y a seguir recorriendo todo el país, destacando los principios de la coalición Sigamos Haciendo Historia: no mentir, no robar y no traicionar al pueblo de México, e invitó a todos los mexicanos a ser protagonistas de este cambio verdadero que está marcando una nueva era en la historia del país.
En un ambiente de esperanza hacia un futuro que seguirá construyendo un nuevo México, “Claudia ya es candidata” se erige como un título que encapsula no solo el momento político actual, sino también la visión de un país que, bajo su conducción, avanzará hacia la prosperidad compartida y la justicia para todos.
