En su informe de los primeros 100 días de gobierno, la presidenta enfatizó que el país mantendrá una relación de respeto con Estados Unidos, sin ceder ante presiones externas.
Ciudad de México, 12 de enero de 2025 – La presidenta Claudia Sheinbaum reiteró que México continuará siendo un país “libre, independiente y soberano”, al presentar este domingo su informe de los primeros 100 días de su gobierno. Durante el evento celebrado en el Zócalo de la Ciudad de México, Sheinbaum subrayó que la relación con Estados Unidos, bajo la segunda presidencia de Donald Trump, se basará en el respeto mutuo y el diálogo, destacando que, aunque México colabora estrechamente con su vecino del norte, nunca se subordinó ni lo hará.
“México se coordina, pero no se subordina”, declaró enfáticamente Sheinbaum frente a una multitud que llenaba la plaza principal de la capital, remarcando la autonomía y soberanía de la nación mexicana. La mandataria señaló que, pese a los retos históricos, la relación con Estados Unidos ha tenido momentos constructivos, como la colaboración entre Benito Juárez y Abraham Lincoln, y el respeto demostrado por Franklin D. Roosevelt hacia Lázaro Cárdenas.
Sheinbaum también destacó la “relación de respeto y cooperación” que existió durante el primer mandato de Trump con su antecesor, Andrés Manuel López Obrador, especialmente en la firma del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), un acuerdo que ha sido clave para la estabilidad y el comercio trilateral.
“Confío en que la relación será de respeto y prevalecerá el diálogo. Nosotros, como país, mantenemos un compromiso con el humanismo y la fraternidad entre los pueblos y las naciones”, agregó la presidenta.
Respecto a las recientes críticas de Trump, quien ha señalado que México está bajo el control de los cárteles del narcotráfico, Sheinbaum defendió la soberanía nacional. “En México, el pueblo gobierna, y estamos comprometidos con resolver los problemas de seguridad. A pesar de las declaraciones falsas, nuestra democracia sigue firme”, sostuvo, refiriéndose a las acusaciones de Trump sobre la supuesta influencia de los cárteles en la política mexicana.
A su vez, Sheinbaum se mostró confiada de que la relación bilateral con Estados Unidos se mantendrá positiva, incluso frente a las amenazas de Trump sobre posibles aranceles y deportaciones masivas, principalmente dirigidas a frenar el tráfico de fentanilo. “México seguirá trabajando de la mano con Estados Unidos, pero siempre defendiendo a nuestras familias, nuestras tradiciones y nuestra dignidad”, señaló.
En su discurso, la presidenta también rindió homenaje a los mexicanos que viven y trabajan en Estados Unidos, muchos de los cuales, según Sheinbaum, contribuyen significativamente al desarrollo del país vecino. “Son trabajadores incansables, científicos, y en muchos casos, héroes que nunca olvidan a su patria”, destacó.
En un tono firme y decidido, la presidenta concluyó que, a pesar de los retos que puedan surgir, México seguirá en pie como una nación soberana y comprometida con sus principios, sin ceder ante presiones externas.
Un país libre y en constante diálogo.