Por Joaquín Pacheco Cabrera
Mara Lezama cerró exitosamente su campaña política en Cancún, en la Plaza de Toros, el pasado miércoles; originalmente se había planeado que se llevaría a cabo en un campo de fútbol, pero el equipo de la candidata morenista demostró una vez más su capacidad para anticiparse a los hechos y previeron muy bien la posibilidad de una contingencia meteorológica, exhibiéndose como excelentes organizadores y anfitriones y logrando un lleno total en el coso de la Bonampak.
La organización fue eficiente y armoniosa, pues con la misma diligencia se veía a Jorge Osorio atendiendo los más mínimos detalles del acomodo de la gente que asistía a ver a su candidata, a Julio Durán muy atento de quienes subirían al estrado y en qué lugar —de hecho, la mano experta de Durán Rueda fue perceptible en la totalidad del evento—, a Alberto Covarrubias junto con Adrián Martínez verificando una y mil veces todos los aspectos de la seguridad y el acceso de la candidata, a la muy eficiente Briget Ortega al pendiente de cada uno de los representantes de los medios de comunicación que llegaron al evento…
En resumen, un cierre impresionante que fue cuidado hasta el menor detalle, lo que permitió hacer brillar el discurso de Mara, quien propició la máxima euforia al afirmar que no habrá nunca más un gobierno rico con un pueblo pobre y, lo que más me llamó la atención, su reiterada mención de que “amor con amor se paga”, pues esto quedó más que comprobado con la impresionante convocatoria que logró esa tarde.
A Mara Lezama siempre se le ha reconocido por ser una luchadora social y por su desinteresada vocación de servicio a la ciudadanía, desde la trinchera radiofónica que mantuvo por muchos años, sin imaginarse que algún día toda esa gente que apoyó se volcaría a su cierre de campaña para verla, escuchar su mensaje y pagar con amor el amor brindado…
El equipo que ha estado a su lado durante toda la campaña también cuenta y mucho, dio cátedra de experiencia, serenidad y armonía para sacar adelante tan gran encomienda, sabiendo que la única que tenía que brillar en el escenario era la candidata, por lo que hay consenso entre los comunicadores de que Mara ha conseguido coordinar una maquinaria bien aceitada, que en automático se engrana sola, justo la clase de apoyo que se requerirá para llevar a puerto seguro el buen gobierno que ha prometido a los quintanarroenses.